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jueves, 25 de octubre de 2012

Juan de D. Ortúzar gana el AGOSECH de Cachagua 2012

Había expectación con lo que podía pasar, hoy, en el AGOSECH de Cachagua, ya que iba Michi Geyger, y los "Cachaguinos", Juan de D. Ortuzar y Terence Cook tenían muchas ganas de intentar quitarle a Michi su invicto del año.

La Cancha de Cachagua es muy complicada y requiere mucho "conocimiento local" por lo que los "locales" pensábamos que podíamos darle una dura pelea a Michi.

Y así fue como ocurrió, ya que Michi no tuvo un buen día, y demoró mucho en "entrar en juego". Al final hizo 80 golpes, ni tan mal considerando como partió en sus primeros hoyos.

El que fue, a la postre, más regular ganó el torneo.

Juan de Dios Ortuzar se sobrepuso a un comienzo errático ya que se subió cuatro golpes en los primeros cuatro hoyos (la simultánea la comenzamos, Juan de D, Michi, René Miranda y yo en el hoyo 4). Pero, se recuperó en forma espectacular al hacer tres birdies consecutivos en los hoyos 10, 11 y 12.

Al final, su 78 fue suficiente para ganar, en un día en que los greens, un poco lentos, pusieron a prueba a todos los jugadores.

Felicitaciones a mi amigo Juan de Dios, que luchó bravamente para ganar, y lo logró.

Por mi lado, un día de dulce y de agraz.

Partí jugando muy sólido, e hice un excelente par de la cancha en mis primeros diez hoyos (hoyos 4 al 13).
Jugué un excelente golf, con muy buena planificación y aplicación de mi Método Mental en este tramo, con seis pares, dos birdies y dos bogeys.

Pero, bastó un grave error de planificación en el peligroso drive del corto par cuatro hoyo 15 para que me saliera totalmente de mi Método.

Es un hoyo que tiene un fuera de cancha por el lado izquierdo. Hay que sacar ese lado totalmente de juego con el drive. No lo hice, y me fui para afuera.

Fue un error tan torpe que me produjo un enojo injustificadamente intenso, lo que me impidió volver a aplicar mis técnicas. De ahí en adelante no pegué ningún tiro, ni putt, con soltura o comodidad. Sentí una presión muy grande al ver que se me iba el torneo.

Sencillamente, nada de lo que intenté para volver al "zone" en que estuve en mis primeros diez hoyos, me funcionó. En mis ocho hoyos finales me subí nueve golpes para un pobrísimo 81.

¿ Decepcionado ?

Claro, pero estas cosas pasan en el golf, especialmente en canchas tan "castigadoras" como Cachagua.

¿ Y que dice la teoría del Golf Mental cuando suceden estas "arrugadas"?

Simplemente hay que olvidar rápido. A veces, sucede nomás, y mientras más rápido se olviden estos episodios, es mejor, de tal manera que no se queden "pegados" en la poderosa Mente Inconsciente.

Ahora a tomar un merecido descanso del golf, ya que es posible que mi intenso ritmo de juego de las últimas cuatro semanas me esté pasando la cuenta.



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